El promedio de pago por stream es de entre 0,00318 y 0,00551 dólares, dependiendo de la plataforma. Es decir, la canción tiene que ser reproducida 250 veces para que ganes 1 euro. Tocar en la calle es más lucrativo que confiar solo en Spotify y plataformas similares.
Bajo el statu quo de la era del streaming, los NFT Musicales pueden convertirse en un modelo de negocio a largo plazo para los artistas independientes. El actual modelo de ingresos de un artista contempla el streaming, las descargas digitales, las ventas físicas y las syncs. Los NFT Musicales son una nueva categoría de generación de ingresos. Por ejemplo, Latasha, una artista independiente con 37.000 seguidores en Twitter, vendió "GoGo Wyne" por 13.4207 ETH, más o menos 41.000 dólares, el equivalente a más de 10 millones de streams.
Pero, ¿qué son los NFTs musicales y para qué sirven? Los NFT (tokens no fungibles -únicos-) musicales son certificados que identifican la propiedad de una obra musical, permitiendo que esta sea intercambiada y vendida. De algun forma, la aparición del NFTs musicales revive de forma digital y única el efecto fetiche de poseer la obra de nuestros artistas favoritos.
Además, con la aparición de los NFTs a los artistas musicales se les abre un abanico enorme de posibilidades: vídeos, temas inéditos, accesos exclusivos a ciertos contenidos, entradas a conciertos, artículos digitales de merchandising… Las oportunidades de monetización van mucho más allá del disco noventero.
“Es el año de los NFTs e industrias como la de la música tienen un gran potencial por explorar” dijo Changpeng Zhao, CEO de Binance, en su visita a Madrid hace tan solo dos semanas.
La idea de que un certificado digital de autenticidad es valioso, pero la obra de arte infinitamente replicable en sí misma no lo es, puede plantear preguntas interesantes. Pero para los amantes de la música, y el arte en general, el escenario más optimista para los NFTs está en que estos den a los músicos la influencia económica de la que carecen en el modelo actual de Internet.
Además, y en consonancia con la opinión de Gary Vinenchuck sobre la tendencia imparable sobre el estatus social híbrido, que se construye y representa tanto en el mundo físico como digital, los NFT musicales serán utilizados por los fans como prueba de status. Un símbolo para demostrar lo mucho que han apoyado a sus artistas favoritos y que los conocieron antes de que dejaran de molar….
