En publi, hay pocas cosas más caras que un anuncio en la Super Bowl. Este año, conseguir que tu anuncio apareciese durante 30 segundos costaba 6,5 millones de dólares. 900.000 más que el pasado año. Está claro que el nivel de awareness es brutal. Y si haces cosas como las de Uber Eats este año te garantizas una buena cantidad de medios ganados.
Pero, ¿vale la pena? ¿Tiene retorno anunciarse en una plataforma con una visibilidad tan amplia pero con un coste altísimo? ¿Qué podríamos hacer en digital con el mismo presupuesto?
Según Digiday, con ese dinero podríamos obtener:
- 650 millones de impresiones en Facebook
- 843 millones de impresiones en Tik Tok
- 4.2 millones de clicks en Google Search o
- 1.7 millones de clicks en la plataforma de vídeos promocionales de Amazon.
- 30 días de TikTok branded hashtag challenges
¿Y si pudieses conseguir lo mejor de los dos mundos?
Eso es justo el pelotazo que ha pegado Coinbase. La empresa de compra-venta de criptomonedas decidió pagar 14 millones de dólares para presentar un QR rebotando. Si lo escaneabas y te registabas te regalaban 15 dólares en crypto.
Con una producción audiovisual que rondó los cero euros consiguieron más de 20 millones de visitas, un mundo de medios ganados, tanto de prensa como de usuarios y dominar la conversación de los anuncios de la Super Bowl. Se cayó hasta su página, el mayor indicativo del éxito de una campaña de conversión.
Coinbase lo tuvo claro. Arriesgó y consiguió la piedra filosofal, awareness, medios ganados y conversión. La triple corona. Y la originalidad y la estrategia son las claves de su resultado.